De acuerdo con datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), América Latina posee reservas clave de litio, cobre, níquel, molibdeno y grafito. Con el auge de la inteligencia artificial (IA), crece la demanda de minerales esenciales para fabricar dispositivos tecnológicos. Esto abre una oportunidad regional que exige modernizar la industria, adoptar tecnología y mejorar infraestructuras.
